La difusión de
la devoción al Sagrado Corazón
de Jesús se debe a santa Margarita de Alacoque a
quien Jesús se le apareció con estas palabras: "Mira este corazón mío, que
a pesar de consumirse en amor abrasador por los hombres, no recibe de los
cristianos otra cosa que sacrilegio, desprecio, indiferencia e ingratitud, aún
en el mismo sacramento de mi amor. Pero lo que traspasa mi Corazón más
desgarradamente es que estos insultos los recibo de personas consagradas
especialmente a mi servicio."
Promesas que hizo Jesús a Santa Margarita, y por medio de
ella a todos los devotos de su Sagrado Corazón:
1. Les daré
todas las gracias necesarias a su estado.
Las condiciones para ganar esta
gracia son tres:
1. Recibir la
Sagrada Comunión durante nueve primeros viernes de mes de forma consecutiva y
sin ninguna interrupción.
2. Tener la
intención de honrar al Sagrado Corazón de Jesús y de alcanzar la perseverancia
final.
3. Ofrecer
cada Sagrada Comunión como un acto de expiación por las ofensas cometidas
contra el Santísimo Sacramento.